La encáustica es una técnica ancestral, antecedente del óleo. La cera se calienta y derrite para mezclarla con los pigmentos, en un proceso laborioso e intenso donde el calor es el protagonista. Sin él, no hay pintura. Los colores que da son intensos y luminosos . El azul mas contundente que conozco lo conseguí con ella. Deslizar la cera sobre el metacrilato fue espectacular: las insinuaciones surgían sin parar. Cada pieza era la propuesta de varias. Decidí contar una historia del viaje de la Vida con este descubrimiento.
El viaje es la forma en la que entiendo la Vida.
Todo viaje implica un recorrido, compuesto de la suma de muchos caminos entrelazados.
Caminos que son dados o que requieren ser explorados,
y caminos que fueron olvidados.
Caminos que siguen presentes,
recordándonos la necesidad de continuar avanzando.
Caminos externos y caminos internos.

Buscando el Norte.





La asamblea de los pájaros.

El soplo del Compasivo

Autorretrato

Ángel de la Guarda.


Dibujar...
aprendí a mirar desde lugares del alma que no sabía que tenia.















